29 de junio de 2014

#FLM2014 - #BLC2014 - OMG - LOL - ROFLMAO


Si veis el título de la entrada podéis pensar dos cosas

  1. Me he vuelto loco.
  2. He estado en la Feria del Libro de Madrid, y he estado confraternizando con blogueros.
Si creéis que la opción correcta es la primera, o pensabais que no necesitaba ayuda inmediata previamente, o es que no habéis oído hablar de la Feria del Libro (y no conocéis la jerga de los #hashtags).

Pues eso. Desde el 30 de Mayo y durante dos semanas (hasta el domingo 15 de Junio) hemos podido disfrutar de la Feria del Libro en el parque del Retiro, soportando un horroroso tiempo caluroso y soleado casi todos los días (y que habrá hecho las delicias de más de uno), hablando con autores, yendo de puesto en puesto, y encontrándonos con viejos (y nuevos) conocidos.

No voy a extenderme en mil y un detalles sobre lo que es la FLM. Si queréis haceros una idea adecuada, pasaros por ahí el próximo año.

¿Qué ha implicado para mí este año? Bueno, con decir que me he pasado seis de los 17 días, coincidiréis conmigo en que he hecho una buena media (uno de cada tres).

El primer día no tenía pensado ir, pero a última hora me enteré de que firmaba una buena amiga, Elena Martínez, la presidenta de la asociación Tiramisú entre Libros, y no pude evitar pasarme a saludar y a comprar su libro. Y aparezco en la dedicatoria y todo.

Y desde ese inicio presuroso ya fue todo cuesta abajo. Al día siguiente firma de libros de Neil Gaiman, de la que tengo recuerdo para la posteridad.

Mis pequeñas joyas firmadas

Hay que agradecer a Neil la paciencia que tuvo de estar firmando durante todo el día, aunque lamentablemente no pudo dedicar mucho tiempo a la gente, apenas unos segundos, porque la cola era inmensa. Eso, y que la organización de la cola dejaba BASTANTE que desear, todo sea dicho. Chicos, si tenéis a alguien tan mediático como él en vuestro stand, actuad en consecuencia. Lo de poner un cartelito de "firmas hasta aquí" moviéndolo cada x tiempo porque por lo visto "puede firmar más" no deja en muy buen lugar la planificación ni las previsiones hechas sobre un best-seller.
Morid de envidia

También pude hacerme con el último libro de Antonio Martín Morales, con el que se cierra la pentalogía de La Horda del Diablo. No puedo hablar de toda la saga, porque para que no me hiciera un George Martin, esperé a tener la novela en mis manos y poder leerme la saga del tirón. Saga que leeré el próximo año para el reto que me ponga en el 2015.

Además asistí a la presentación de la continuación de De Madrid al Zielo, y pude agenciarme el primer libro, que por ahí está esperando en la pila de "pendientes por leer" que se balancea peligrosamente sobre mi cabeza.

Una de zombies del extrarradio

Y como colofón a compra de libros propios, (que no ajenos, que pude hacerme con una edición de Drácula de Valdemar de la colección de Diógenes que tenía muy buena pinta) se encuentra el manual básico de Wraith: El Olvido. Habiéndome comprado varios manuales complementarios hace unos años, el conseguir el manual básico en castellano me parecía una compra obligada.

Después de tantos años... mío, por fin.

Para los que no hayáis oído hablar de este juego, no cabe más que alabar uno de las mejores ambientaciones de Mundo de Tinieblas, y de los juegos de rol en general. Eso sí, jugar es otra cosa. Quién sabe si algún día puedo hacerle uso. Eso y a mi manual de Demon: The Fallen, otro manual que compré años ha y que sólo he podido disfrutar de su trasfondo en mis ratos de lectura.

Adquisiciones aparte, ha sido una Feria del Libro de la que al menos he podido disfrutar, he podido reencontrarme con viejos conocidos, hacer nuevos compañeros blogueros y desvirtualizar gente a quien hace tiempo que quería ver, pero eso es otra historia y debe ser contada en otra ocasión.

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